Como tapar el sol con un dedo Lo que nos dejó el ayer

 Como tapar el sol con un dedo 

                        Lo que nos dejó el ayer 

                                   Por Kristal Guerrero Pérez 

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Vivir la pandemia causada por el COVID-19, es una de las peores situaciones en las que nos hemos visto envueltos, y es que no solo nos perjudicó cuando nos tuvimos que resguardar en casa, sino que tuvo grandes consecuencias para lo que venía después; el regreso a la nueva realidad.

Estar en un solo lugar todos los días, encerrados, sin la posibilidad de salir, causó a muchos, sino es que a todos, grandes problemas, familiares, personales, económicos, de trabajo, educación, mentales o emocionales, etc., en fin, una lista interminable, sin embargo, tomaré más enfoque a los dos últimos, la educación y, por supuesto, la salud mental y emocional.

No es un secreto que la calidad de la educación en México es muy baja, más ahora, sumándole el hecho de que fuera en línea. En primer lugar no contábamos con la tecnología necesaria, para algunos fue más fácil conseguirla, pero para otros no fue así, por lo que fue un gran impedimento para continuar con los estudios. Por otro lado, los profesores no estaban capacitados para nada de esto, por lo que la educación fue decayendo aún más.

Pero esto no es todo, vivir en un solo lugar, donde tenías que vivir rodeado de la misma gente todos los días, de quienes podías tener una relación buena o tal vez mala, fue lo que provocaba que los problemas fueran aún peores, por lo que la salud mental de los estudiantes, en este caso, se perjudicaba.

Todo esto al unísono, fueron uno de los principales factores para que muchos de los alumnos cayeran en un pozo, el aprendizaje era deficiente, y la parte emocional no ayudaba en nada, por lo que algunas de las consecuencias fue dejar los estudios por depresión, estrés, etc., o, en otros casos, ir bajando sus calificaciones.

Sin embargo, cuando fue el momento de regresar a todas las labores, fue cuando nos dimos cuenta, que la mala educación que llevábamos en línea perjudicaría nuestro labor a futuro, ya que las clases a las que volvimos eran avanzadas en comparación con las que llevábamos antes del encierro, por lo que se nos exigía más, a pesar del escaso conocimiento que se tenía, lo que ocasionó que se tuvieran que ver otras opciones, repetir semestres, tomar cursos extras, y demás, ya que, tristemente, para un estudiante y futuro egresado, el mundo no lo espera.