¿La generación Z, ¿son los buenos o los malos?

Por Arreola Castelán Wendy

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Desde la perspectiva de la sociedad adulta, gran parte de ella considera completamente perdida a esta nueva generación. Es comprensible ya que no todos piensan igual y es aceptable estar o no de acuerdo con ello, lo que realmente no es aceptable, es su generalización y cerrarse en esa perspectiva sin el beneficio de la duda.

Si bien, la idea surge gracias a los comentarios un poco irracional por parte de la misma sociedad y las respuestas poco amistosas dadas por los miembros de dicha generación, lo que ocasiona el verdadero choque entre ellos. Entonces ¿cuál es el verdadero problema de la sociedad con esta generación? Considero que no existe un verdadero problema como tal, o algo que se le asimile, sin embargo, puede que sea la aceptación del cambio lo que está costando trabajo afrontar, desde cómo se vive, piensa, actúa o incluso la manera de vestir. Los tiempos van cambiando, la innovación está presente, es lógico que nada va a seguir siendo igual con el pasar de los años. Es razonable que desde antes se tenia una manera de ver las cosas, en la que todo era regido, controlado y supervisado, en la que todo era un poco más difícil de lograr las cosas sin los avances tecnológicos, y que dentro de la misma sociedad se cumplía un perfil en cada persona para ser aceptada en todos los ámbitos como el trabajo, la escuela, amigos la familia. Pensar que por tener bastantes novedades que anteriormente no se veían, libertades que no se daban y privilegios que no existían, se afirma que es mucho más “fácil” vivir.

No por el simple hecho de afirmar, significa que sea cierto. Y este punto es en general, así como todos tuvieron su manera de afrontar las ventajas y desventajas, los problemas y soluciones con o sin avances, no lo vuelve diferente a la actualidad, al contrario, incrementa los obstáculos, que si bien es difícil pero no imposible.

No pueden decidir si esta generación es buena o mala, si son la salvación o son los perdidos, puesto que es lo mismo con las anteriores generaciones, una anterior a otra opinaba de sus actitudes y comportamientos, nadie se salva de ser juzgado, aunque sea en lo más mínimo. Todo depende de quien sea más apto para sobrevivir en un mundo de cambios, adaptarse y seguir. Mi perspectiva se inclina más a que esta generación es diferente por mucho de las otras, no somos los buenos, pero tampoco los malos. 

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