The Lighthouse (El Faro) una joya infravalorada

 

The Lighthouse o El Faro una de las mejore películas del año 2019, dirigida por Robert Eggers, director de The Witch del año 2015, Eggers trajo nuevamente un filme que no decepciona, aunque los grandes festivales no le dieron el reconocimiento que merecía The Lighthouse está llena de trasfondo, de simbolismo y de confusión para sus espectadores, siendo una cinta lo suficientemente atrevida y arriesgada como para retomar elementos del cine de antaño con un formato y narrativa que remonta a los inicios del arte fílmico.

El faro es una película basada en una desaparición real, en un misterio no resuelto dónde 3 hombres cuidadores de un faro desaparecieron. Además de las excelentes actuaciones, la estrella de la película es el encuadre lo que vemos en pantalla, la estética realmente se puede decir que es sublime, visualmente tiene muchas referencias a grandes películas de los años 60, otra cosa que deberíamos de reconocer es el simple pero maravilloso diseño de arte, todo lo que vemos fue construido, no existía antes y la verdad es que la precisión al detalle de cada set es increíble, en ese mismo sentido tendríamos que reconocer a la productora A24. Y lo que tendríamos que reconocer es su esfuerzo de siempre traernos películas diferentes e interesantes, pero sobre todo muy bien hechas, pueden gustarnos o disgustarnos sus producciones, pero siempre están llevadas con la más alta calidad y el faro no es la excepción es una película de época con un estilo gótico. La cual trata acerca de dos hombres, un anciano pedorro, alcohólico y tétrico, interpretado de una manera estupenda por Willem Dafoe, este anciano tiene que cuidar un faro con su joven ayudante interpretado por Robert Pattinson, básicamente es una historia de cuando dos generaciones totalmente diferentes tienen que trabajar juntos en un lugar, la genialidad de la película es que tiene momentos shakespirianos. Es muy interesante que como audiencia no sabemos qué creer, qué es real, nos sentimos igual de confundidos que nuestro protagonista, la película es ambigua a propósito, como lo dijo en entrevista su director Robert Eggers “la película es intencionalmente abierta a interpretación para que cada quien llegue a sus propias conclusiones”, es así que a través de la película nosotros mismos nos preguntamos ¿quién tiene la razón?, ¿qué es la verdad? y quién está realmente loco, también hace que nos preguntemos ¿qué está pasando?, por un lado, podríamos decir que es una película sobre el juicio en donde dos hombres un poco inmorales no logran trabajar como compañeros, caen en una competencia inmadura, caen en la lujuria y cada uno cae en el abuso del poder, podríamos decir que se trata de la manera en la que dos generaciones en el mundo, la generación vieja no siente que la generación nueva se ha ganado su lugar, también la generación vieja piensa que la generación nueva es una bola de huevones que no hace lo que se les dice, podríamos decir que en esta sociedad moderna los jóvenes no respetan a sus superiores, ni las jerarquías de poder, sin ninguna experiencia se creen listos para llegar hasta lo más alto del faro, por otro lado podríamos decir también que la película quiere mostrarnos que las mentes débiles son más propensas a la violencia, sobre todo si lo están bajo la influencia del alcohol, las mentes débiles son fácilmente susceptibles a la tentación y son más impulsivas emocionalmente, por eso en un segundo los vemos abrazados casi besándose y al otro a punto de matarse.

Una película que si o si le tienes que dar una oportunidad, actualmente se encuentra en Netflix.

 

Por: Alejandro Sandoval Altamirano

IG: @sandovalada